Queremos agradeceros a todas las familias la confianza depositada en nosotras. Agradeceros toda la colaboración y como seguir de forma activa todas nuestras propuestas y nuevas actividades. Agradeceros el tener esos hijos tan grandes, que nos hacen aprender día a día y nos motivan en todo momento.
Os dejamos una gran poesia...
https://www.youtube.com/watch?v=5xMyQex-Kbc
Y con esta canción de fin de curso, nos despedimos... Os llevamos en el corazón... Y os deseamos que descanséis y disfrutéis del verano...
https://www.youtube.com/watch?v=INPYdKQFJaw
Un gran abrazo de todo el equipo docente del centro.
domingo, 29 de junio de 2014
Hola:
Aquí os dejos los ejercicios de praxias como os comenté en las tutorías. Son fáciles y divertidos, y ayudarán a los niños a pronunciar y articular mejor.
Aquí os dejos los ejercicios de praxias como os comenté en las tutorías. Son fáciles y divertidos, y ayudarán a los niños a pronunciar y articular mejor.
PRAXIAS BUCALES, RESPIRACIÓN Y
SOPLO
La realización de actividades en
las que se trabajen la tonicidad y movilidad de los órganos que intervienen en
la producción de los fonemas (de los
sonidos del habla), es de gran importancia. Tengamos en cuenta, que para
hablar, debemos ser capaces de tener gran agilidad en la lengua, hacerla vibrar
por ejemplo para decir la RR ,
tener fuerza, etc. Por ello debemos trabajar todos estos órganos fono
articulatorios: labios, lengua, músculos maseteros (se observan al apretar los
molares), músculos buccinadores (las mejillas). Lo haremos con lo que vamos a
denominar praxias.
Nota: Es muy importante que el
niño coma alimentos sólidos. Que mastique, que use los músculos de su boca
constantemente. Si acostumbramos a nuestro hijo a no tomar alimentos en los que
tenga que masticar bastante (si solo le damos purés, sopas, yogures, etc.)
entonces no está ejercitando su musculatura como debería. Si le damos alimentos
sólidos, hacemos que ejercite sus músculos y propiciaremos la buena
pronunciación de los fonemas.
PRAXIAS
1. Vamos a colocarnos frente a un
espejo. Delante del mismo vamos a explorar nuestra cara y nuestra boca. Le
vamos a pedir a nuestro hijo/a que:
a. Abra y
cierre los ojos varias veces
b. Que mueva
su nariz como si fuera un conejo.
c. Que intente
abrir y cerrar las alas de la nariz.
d. Que cierre
fuerte la boca apretando con los dientes y toque su cara para ver los
músculos/zonas que se ponen duras.
e. Que abra la
boca como un león y que mire cuántos dientes/muelas tiene.
f. Que mueva
su lengua en varias direcciones. Que vea cómo se mueve y haga “tonterías” con
ella.
g. Que le tire
besos al espejo.
h. Que intente
poner los labios de distintas formas.
i. Que infle
sus carrillos y suelte el aire de golpe.
j. Que sonría con
los labios juntos y después dejando ver los dientes.
k. Que ponga
cara de tristeza, de enojo, que haga como que llora…
2. Vocalizamos: Vamos a mirarnos
en el espejo y vamos a decir las vocales de forma muy exagerada. La lengua
deberá quedar dentro de la boca.
a. “Primero
decimos aaaaaaaaaaa: abrimos la boca como un león.
b. Después
decimos eeeeeee: y sonreímos.
c. Ahora
decimos iiiiiiiiiiiii: volvemos a sonreír.
d. Decimos
ooooooooooo: ponemos los labios haciendo círculo.
e. Y por
último la letra uuuuuuuuuuuuuu: cerramos un poco más el círculo.
3. Caminitos en un plato: Cogemos
un plato y ponemos un poco de Nocilla, leche condensada o sirope, pero haciendo
un caminito. Si el plato pesa poco lo pegamos con cinta adhesiva a la mesa.
El/la niño/a deberá recoger el caminito usando para ello la lengua. No podrá
utilizar las manos.
4. Nos limpiamos las muelas:
ponemos un poco de caramelo, gusanito, o algo por el estilo en las últimas
muelas. El/la niño/a debe limpiarlo con su lengua.
5. Ponemos Nocilla, leche
condensada o algún alimento pegajoso alrededor de los labios y debe relamerse
(con la lengua) hasta limpiarlo.
6. Gusanitos: Humedeceremos un
gusanito con la propia saliva del niño. Se lo ponemos “pegado” en distintos
sitios alrededor de la boca y le instamos a que se lo quiete con la lengua.
7. Granitos: ponemos sobre un
plato trocitos pequeños de gusanitos o algo que se pegue a la lengua con
facilidad. Deberá recoger las migajas con la lengua una por una.
8. ¿Cuánta fuerza tienes?:
Colocamos una cuchara o un platito a los lados de la lengua y le pedimos que
empuje mientras nosotros hacemos presión para el lado contrario.
9. Petite Suite: Le pediremos al
niño/a que se coma un Petite Suite usando sólo la lengua. Deberá apurar todo lo
que pueda.
10. Cuchara en equilibrio: le
pediremos al niño que sostenga con la lengua una cucharilla. La colocamos en
posición horizontal, atravesada.
11. Carrera de cucharas: hacemos
un pequeño recorrido sobre la mesa y hacemos una competición de cucharas. Las
ponemos en la mesa y debemos empujarlas con la lengua. Podemos usar algo que
pese un poco más.
12. Nos convertiremos en
serpientes y moveremos todo lo rápido que podamos la lengua de un lado a otro
de la boca y de arriba hacia abajo.
13. Nos convertimos en sapos y
sacamos y metemos la lengua, con los labios lo más juntos posible, todo lo
rápido que podamos.
14. Brujas: Ahora vamos a ser
brujas con los dientes picados. Ponemos chocolate en los dientes (tanto por
delante como por detrás) y el/la niño/a deberá frotarlos con la lengua
15. Lagartos:” los lagartos se
frotan el cielo de la boca. Nosotros vamos a hacer lo mismo que hacen ellos.”
Podemos poner una pastillita de chocolate en el cielo de la boca o un caramelo
masticable.
16. Pompas. Con el chicle, intentaremos
hacer pompas. Esto requiere que tengamos fuerza en la lengua.
17. Globos: le daremos globos
para que los infle. Podemos ponerle un tiempo y decirle que vamos a hacer una
competición para ver quién infla más globos en un minuto de tiempo. Podemos cronometrar
para ver quién tarda menos en inflar 5 globos, por ejemplo.
18. Pedimos que llene la boca de
aire y que lo aguante dentro. Cuando sea capaz de hacerlo le apretamos en los
carrillos de modo que tenga que hacer más fuerza con los labios para mantener
el aire
dentro.
19. Pintalabios: cogemos un
pintalabios y le pintamos los labios. Le pediremos que de besos en una hoja
blanca, pero debe poner “morritos” de modo que el beso quede pequeño. Podemos
ir cambiando la posición de la boca al dar besos, y que vea el efecto
que produce ello al dar el beso
(se quedarán distintas marcas).
20. Ritmos con la lengua: con el
chasquido de la lengua, haremos ritmos: chasqueando más o menos veces, más
rápido o más lento. Pajita: sujetamos una cañita con los labios. Al principio
podemos coger cañas más gordas y conforme vaya cogiendo práctica utilizar otras
más finitas como las que vienen en los zumos y batidos.
21. Coger agua: absorbemos el
agua y le decimos que ponga la lengua en el final de la caña cuando ésta está
llena de agua. Que la mantenga así durante un rato y después quite la lengua.
El agua caerá. Repetir el proceso hasta que comprenda cómo se hace.
22. Trasvasar agua: cogemos dos
vasos. A uno le ponemos agua y una cañita. Le pedimos al alumno /a que chupe el
agua del vaso, la mantenga en la cañita y la traspase al otro vaso.
23. Gárgaras: beberemos un poco
de agua y haremos gárgaras. De esta forma estimulamos la zona de atrás de la
garganta (velo-faríngea). Esta actividad también disminuye la tensión que
podamos acumular
en esta zona.
RESPIRACIÓN
Es de suma importancia que los
niños aprendan, ya desde los primeros años de escolarización, a realizar una
realizar una buena respiración. Si se les enseñara este aspecto en el colegio,
se evitarían posiblemente muchas patologías que surgen después. Sin ir más
lejos, los mismos maestros, sufren constantemente problemas de voz.
Al hablar, debemos coordinar
respiración y voz. Me voy a centrar en la respiración costo diafragmática que
es la que me parece más completa y más aire aporta a la fonación. Voy a decir
las características de este tipo de respiración, pero será un terapeuta el que
deba enseñar a realizarla.
En este tipo de respiración,
notamos cómo se nos “hincha” la barriga. Estamos llevando el aire a la zona
baja de nuestros pulmones.
Normalmente, cuando respiramos,
tendemos a ensanchar la parte del tórax, encoger el estómago y subir los
hombros. Este tipo de respiración no aporta demasiado aire para la fonación. Al
“encoger” la barriga estamos restringiendo la zona en la que podemos meter el
aire.
Vamos a pararnos a observar
nuestra respiración. ¿Qué pasa si a un globo le aprietas cuando intentas que se
llene de aire? Podríamos decir que nosotros somos un globo cuando respiramos.
Cuando el aire entra en nuestro cuerpo, nuestra barriga y nuestro tórax están
ensanchados; cuando el aire entra en un globo, éste está hinchado. Cuando el
aire sale de nuestro cuerpo, nuestra barriga y tórax se contraen; cuando el
aire sale
del globo éste de deshincha.
Vamos a intentar primero realizar
una respiración abdominal. Nos vamos a tumbar en el suelo, boca arriba,
flexionando las rodillas y vamos a poner una mano sobre el abdomen y otra mano
sobre nuestro pecho.
Vamos a intentar llenar nuestra
barriga de aire sin que se llene el pecho (respiración abdominal). Notaremos
que nuestra barriga sube y baja: debe subir cuando entra el aire en nuestro
cuerpo, y bajar cuando sale el aire.
Suele ser el movimiento contrario
al que hemos explicado antes que se suele realizar.
Cuando seamos capaces de realizar
la respiración abdominal, realizaremos la respiración completa. En ella,
intentaremos que el aire llene nuestro abdomen y nuestro pecho.
Si tenéis oportunidad de que os
enseñen de primera mano este tipo de respiración, os aconsejo que lo hagáis y
que la pongáis en práctica.
En las actividades que propongo,
lo que vamos a intentar es tener el control de la respiración. Siempre vamos a
realizar la respiración como se ha explicado.
Aguantamos el aire: realizamos
una inspiración profunda y aguantamos el aire dentro durante cinco segundos.
Conforme vayamos tomando práctica con la actividad, iremos aumentando el
tiempo.
Alternamos: vamos a ir realizando
distintos tipos de inspiraciones: unas más profundas que otras.
El cuento del barquito:
Nuestra barriga es el mar y
cuando se mueve hace olas. Cuando metemos el aire dentro de nuestro cuerpo,
nuestra barriga sube y las olas también. Cuando el aire sale de nuestro cuerpo,
nuestra barriga baja y las olas también. (Ponemos un barco de papel en el
abdomen) En este barquito va subido un niño que quiere que haya olas muy
grandes. Así que tenemos que meter dentro de nuestra barriga mucho, mucho aire.
Ahora en este barquito, va subido
otro niño que no le gusta que haya olas muy, muy grande. Así que vamos a meter
aire en nuestro cuerpo, pero no demasiado.
El escalador: Le vamos a enseñar
al niño/a unos dibujos de unos escaladores que van a subir una montaña. “Cuando
nuestros escaladores suben la montaña, nosotros tenemos que meter el aire en
nuestra barriga y ponerla gorda. Cuando el escalador baja la montaña, nosotros
vamos a expulsar el aire de nuestra barriga, y se quedará deshinchada, como los
globos cuando se desinflan.
Vamos a jugar con la altura de
las montañas. Si las montañas son altas la inspiración será profunda; si la
pendiente es muy inclinada, entonces la inspiración y/o espiración será muy
rápida, expulsando el aire de golpe; si en la cima de la montaña hay una zona
llana, aguantaremos el aire dentro de nuestros pulmones, etc.
El soplo está ligado a la
respiración.
Práctica en los ejercicios de
respiración que vamos realizar para ello la respiración enseñada anteriormente.
Debemos controlar la dirección y
fuerza del soplo.
- Nuestra boca: vamos a mirarnos
en el espejo, y vamos a ver cómo somos capaces de echar el aire por nuestra
boca: vamos a soplar.
- Molinillo: Intentar hacer un
soplo largo para que el molinillo esté en movimiento mucho rato.
- Bolitas de papel:
Ponemos bolitas de papel y
“porterías”. Tenemos que meter las bolitas en la portería del contrario,
soplando.
- Tocar una flauta:
El niño/a deberá para ello
controlar la salida del aire por la boca. Lo que menos nos importa es que no
sepa tocarla. Puede ser un tormento de golpe; si en la cima de la montaña hay
una zona llana, aguantaremos el re dentro de nuestros pulmones, etc.
SOPLO
Soplo está ligado a la
respiración. Es importante que tengamos práctica en los ejercicios de
respiración para poder realizar bien éstos, ya que vamos realizar para ello la
respiración enseñada anteriormente.
La dirección y fuerza del soplo.
Vamos a mirarnos en el espejo, y
vamos a ver cómo somos capaces de echar el aire por nuestra boca: vamos a
soplar.
Necesitamos un molinillo de los
que se mueven con el aire. Soplar para hacerlo girar.
Un soplo largo para que el
molinillo esté en movimiento mucho rato.
- Soplar velas: encendemos velas
y le pediremos que las sople. Al principio la distancia entre la vela y la boca
del niño será corta, pero conforme vaya adquiriendo habilidad en el ejercicio la
aumentaremos.
- Pompas: hacemos pompas de
jabón, siempre realizando la respiración de la forma enseñada. Para soplar
pondremos “morritos”.
- Tocar una trompeta: con una
trompeta de las de juguete, pediremos al niño/a que inspire y sople por la
boquilla. En este ejercicio también se suelen trabajar los músculos
buccinadores (carrillos), ya que éstos se inflan cuando intentamos soplar con demasiada
fuerza. Puede ser un tormento de golpe para quien lo escuche, pero para el/la
niño/a seguro que parece divertido.
- Silbato: haremos pitidos largos
y cortos; fuertes y flojos. Los alternaremos. Podemos poner una hoja con rayas
en los que las rayas largas signifiquen pitidos largos y las rayas cortas,
pitidos cortos; podemos usar puntos gordos para pitidos fuertes y puntos
flojos para pitidos flojos.
- El cuento del viento:
Había una vez una niña que tenía
una cometa y quería que volara. La niña salió a la calle muy contenta para
hacer volar su cometa, pero tenía un problema: no había viento. Entonces llegó Susú
y le preguntó:
- ¿Qué te pasa?
- Que no puedo volar mi cometa
porque no hay viento.
- No te preocupes, yo te ayudaré.
–Dijo Susú.
Entonces Susú, inspiró y cogió
aire, y empezó a soplar y a soplar. (El/la niño/a hará esto). La cometa de la
niña empezó a volar. Y Susú siguió inspirando profundamente y soplando. Cuando la
cometa estaba en todo lo alto, Susú ya no tenía que soplar tan fuerte. Así que
inspiró un poco de aire y sopló sólo un poco. De pronto la cometa de la niña se
vino hacia el suelo, pero antes de que se cayera, Susú, inspiró profundamente y
sopló, y sopló todo el tiempo que pudo. La cometa volvió a subir muy, muy alto.
La niña estaba muy contenta. Cuando la cometa parecía que se iba a caer, Susú
inspiraba un poco de aire, y soplaba fuerte y rápido (inspiración poco
profunda, soltamos el aire de forma enérgica).
Susú y la niña fueron muy amigos
y cada vez que la niña quería volar la cometa, Susú estaba allí para que
pudiera hacerlo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)